Hola a todos!! ¿Cómo estáis?
Yo vuelvo a la carga, esta vez con una nueva manicura.
Hace ya un tiempo considerable, allá por el verano, os enseñé mi primera toma de contacto con la técnica del reverse stamping, la verdad es que no he podido practicarla mucho, porque hay tantas técnicas y tantas cosas que quiero probar, que no doy abasto.
Hace también unas cuantas entradas, os enseñé una nueva adquisición, mis tapetes o mantelitos de silicona, usados en su mayor parte para desarrollar esta técnica de manicura.
Y como en ambas os dije que haría un paso a paso más detallado para las que así me lo pedisteis, uniendo las dos entradas, aquí tenemos el proceso, que como veréis a continuación es muy sencillo.
En primer lugar os enseño los esmaltes elegidos. La placa casualmente es la misma que en la otra entrada del reverse stamping, pero es que las flores para esta técnica vienen muy bien, son muy inspiradoras y fáciles de colorear jejeje. La placa es la BPL-029 (os remito a la otra entrada, con el link en el primer párrafo, para verla con más detalle, precio y dónde comprar).
El tono morado-rosado es el 26 de Golden Rose.
El morado clarito es el 19 de Vera Valenti.
Como base usé la base SOS de Eveline.
El tono beige es una muestrecita de OPI, no tiene número de referencia.
Los dispuse de esta manera, en principio iba a utilizar un tono de base blanco para las uñas en las que iba a poner la pegatina, porque así resaltaría más, pero al final opté por este tono beige, entre otras cosas porque se me está secando y lo quiero utilizar antes de que se estropee, y no encuentro muchas ocasiones para ello.
Pues esto por un lado, realizarnos la manicura de nuestra manera habitual con los colores que hayamos elegido.
Mientras tanto, tenía las pegatinas secándose, para ir aprovechando el tiempo.
Y aquí he intentado ilustraros el paso a paso de la mejor manera posible, la verdad es que ahora que lo veo pienso que no me ha quedado demasiado bien, ni demasiado claro, pero es un poco difícil retratar el proceso. Para estas cosas viene mejor un vídeo, ¿verdad? jejeje. Pero bueno, espero que se pueda entender.
- Lo primero de todo es elegir la placa y el diseño. Ahí veis el que yo elegí para esta ocasión.
- Ponemos una base, en mi caso transparente, pero también podría ser en color, depende de la manicura. Dejamos secar.
- Estampamos con nuestro sello el diseño sobre la base transparente ya seca.
- Os lo enseño un poquito más de cerca.
- El siguiente paso es colorear el diseño con los colores que queramos. En mi caso, los dos morados usados anteriormente y un rosa.
- Si vamos dando la vuelta a la lámina de silicona podemos ir viendo si nos va quedando bien o no, y si estamos pintando dentro de la línea.
- Así es como queda una vez pintado. Esperamos a que se seque del todo.
- Con la ayuda de un palito de naranjo vamos despegando el diseño.
- Ahí podéis ver cómo quedan todos despegados, se retira muy fácilmente y no se rompen.
Si no tenéis esta lámina de silicona no os preocupéis, lo podéis hacer sobre otra superficie. De las que yo he probado, lo que mejor va es hacerlo directamente sobre el estampador, como hice yo en la entrada anterior. O hacerlo sobre la parte interior de un cartón de leche, sobre la parte plateada, yo tengo cortado un rectángulo pequeño que uso para esto, y también da muy buen resultado y se despega fácilmente.
Bueno, pues el siguiente paso es poner las pegatinas sobre las uñas elegidas, después pasaremos una capa de top coat por encima, y retiraremos lo sobrante con la ayuda de un palito de naranjo o un bastoncillo y un poco de quitaesmaltes.
Et voilá! Este es el resultado final, ¿a qué es más fácil de lo que parecía en un principio?
Lo único es que hay que tener un poquito de tiempo para que las pegatinas se sequen, pero podemos incluso tenerlas hechas del día anterior, y así no hay problema.
¿Qué os ha parecido? ¿Soléis usar esta técnica?
Que tengáis un buen inicio de semana!!
Muchos Besos!!
Hasta la Próxima!!